Como es sabido el desayuno es muy importante y el abstenerse de esta comida no es recomendable, aunque en ocasiones nuestras vidas se encuentran demasiado sobrecargadas de actividades y nos privamos del desayuno. Algunas personas pueden pensar que el no tomar desayuno no les afecta en nada y esto lo pueden reemplazar con una merienda, sin embargo este es un pensamiento muy errado puesto que cada vez que se priva del desayuno su cuerpo debe acomodarse a ayunar.
Al no ingerir la alimentación adecuada para comenzar nuestro día, nuestro organismo lo que hace es recurrir a la reservas de energías que posee y con ello vemos afectado nuestro rendimiento normal puede que nuestro organismo funcione a tope y en el caso de hacerlo el cuerpo en algún momento siente todo esa carga. Entre los problemas que podemos presentar es el de olvidar rápidamente las cosas afectando nuestra memoria, también al no consumir alimentos al desayuno nuestros jugos gástricos continúan trabajando y esto puede ocasionar un problema mayor como la gastritis.
Otro de los problemas que debemos considerar y que no es muy evidente para todas las personas es que al no tomar desayuno nuestro organismo va acumulando esa necesidad de comer y esto aunque no lo vea y no lo sienta es así. Con el ello al final de día a la hora que deseamos controlar nuestro apetito y comemos poco terminamos exhaustas por el hambre.
El no consumir su desayuno crea una acumulación a largo plazo del metabolismo y como lo hemos explicado en otros artículos nuestro metabolismo controla una variedad de funciones en nuestro cuerpo entre ellas el peso. Es por ello que para mantener un metabolismo adecuado nunca se salte sus comidas y respete el horario como la porción que debe comer a cada hora.
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